Se viene el nuevo año, que emoción, ¿por qué no me motiva? Hace algunas cuantas vidas perdí la sensación de asombro ante lo que se da siempre, pero la humanidad sigue asombrándose de lo que ocurre cada día. Unas cuantas luces explotando, cenizas que matan peces, muchas drogas y alcohol no es mi idea de diversión. Quizás porque soy un dinosaurio arcaico o porque soy un extraterrestre evolucionado, pero tanta palabra no es más que para decir que esta noche prefiero leer un buen libro, dar un buen abrazo y mantenerme en silencio que preparar una dantesca jarana con ruido y caos por doquier. Es que mi idea de celebrar no es estar incomodo caminando entre miles y miles de personas, ni transformar una hermosa playa en un recital.
Hoy brindo (con agua pues de licor ni los dulces como) por los que han comprendido que la alegría es el Amor, y que la felicidad no es algarabía, sino paz interna.
Desde lo profundo de mi llama que se consume, Bendiciones. Les amo. Namarië
